Charlamos con la secretaria de prensa de Amsafe Rosario, Claudia Semino, sobre el impacto de la pandemia en las escuelas, la complejidad de mantener el vinculo pedagogico, la solidaridad de los docentes con los sectores más vulnerables ante la cuarentena y la necesidad de pensar en los salarios docentes en medio del agravamiento de la situación social.
La discusión sobre la cuarentena comenzó en torno a la continuidad de las clases y la asistencia de los niños en las escuelas. Según explica Claudia Semino, secretaria de prensa de Amsafe Rosario, “la primera necesidad que teníamos era que los chicos no estuvieran en las escuelas; si bien no están en la franja de factor de riesgo grande, si lo son de contagio y propagación. inmediatamente a ese pedido comenzamos a ver como continuábamos con lo pedagógico ya que no todos tienen acceso a la tecnología y a las plataforma virtuales; whatsapp, facebok”
Los docentes establecieron guardias mínimas en las escuelas y, a partir del viernes 20 cuando comenzó a regir el Aislamiento social preventivo y obligatorio, se abocaron a garantizar el trabajo en los comedores escolares para entregar viandas.
Con respecto a esta tarea afirma que “en muchas escuelas se entregaron bien pero en otras tantas se hubo problemas, como que se enviaron raciones muy escasas, en otros lugares la demanda se triplico; ya que días anteriores había hermanitos, hermanitas que no iban al comedor, porque había un ingreso de dinero a la casa, pero eso ya no está, ese cambio fue en una semana.”
Otro gran inconveniente que plantea Semino a partir de lo que van viendo es que el gobierno provincial no envió los suficientes medios económicos para poder solventar los gastos de descartables para armar las viandas y para comprar artículos de bioseguridad e higiene para quienes atienden.
“Se necesita que cuiden a los que cuidamos”, afirma la dirigente docente.
Con respecto a las perspectivas de la tarea Claudia afirma que “nosotras continuaremos durante las próximas semanas recorriendo las escuelas, pero entendemos que si no hay una fuerte presencia del Estado trasladando el dinero de los que más tiene y aportándolo a las necesidades básicas, se va a hacer complicado”
El parate económico y el rol de las escuelas
Y reclama que “el gobierno debe darse cuenta, y muy difícil no resulta, que la situación con este parate se iba a agravar y debió enviar los fondos necesarios para poder paliar las necesidades. No es muy difícil entender que hay mucha gente que vive el día a día y que no tiene para aguantarse dos semanas sin trabajar y era lógico que esa gente fuera a recaer en las escuelas a retirar viandas”
Sobre el compromiso de la escuela y los docentes con la situación afirma que “yo entiendo que si hay alguien comprometida en toda esta situación es la escuela y si alguien tiene que dar una mano esos somos las y los docentes. Porque tenemos una estrecha reacción con la comunidad y con las chicas y los chicos; sin olvidarme, obviamente de quienes son un factor de riesgo como quienes trabajan en salud. También estamos destinadas a poner la cabeza para ver como generamos contenidos y podemos ayudar cada una, cada uno desde nuestra casa”
La necesidad de ayudar
En medio de estas tareas nos cuenta también que desde las mimsas docentes van naciendo iniciativas para poder colaborar desde diferentes lugares.
“Desde la agrupación docente La Mariano Moreno, surgió la idea de la confección de barbijos. Debido a la faltante que se escuchaba por compañeras que trabajan en Salud, la compañera Sonia, secretaria de Género del gremio, comienzo con la propuesta que enseguida tuvo repercusión en el grupo de whatsapp. A partir de ahí se fueron distribuyendo tareas. El primer inconveniente fue comprar la tela; así que Ivana la compró vía internet y un grupo se encargó de organizar a las costureras: Gimena, Mariela, Laura, Alejandra y Carolina. Para finalizar organizamos un grupo para la entrega de los barbijos. Tuvimos cantidad para llegar al personal de diez escuelas”
Semino asegura que la actividad sirvió también para que familiares mayores de las compañeras tengan una actividad para hacer en la cuarentena y remarco también que esta entrega de barbijos es una forma de agradecer la gran labor que hace el personal de asistentes escolares, directivos y docentes para que los niños y niñas puedan comer, ya que esos elementos tienen que ser provistos por el Estado de manera suficiente.
“Se vienen tiempos difíciles que van a requerir de todo el ingenio y que continuemos estando presentes para salir adelante”, comenta.
Los docentes y una paritaria en cuarentena
Semino concluye que “el sector docente va a quedar extremadamente complicado después de todo esto. Hay muchos docentes que son sostén de familia y va a ser muy difícil si el gobierno no toma el problema de la recomposición salarial. Arbitrariamente el gobierno provincial cerró la negociación paritaria y todo el canal de diálogo que es fundamental en este momento. Nosotras estamos pidiendo un aumento de emergencia para equiparar la falta que tuvimos el año pasado por la inflación y después es fundamental que mantenga la cláusula gatillo que es lo que por lo menos nos hace empatarle a la crisis. Las paritarias, lejos de ser un planteo egoísta es un planteo fundamental”
Destacó también la labor que están haciendo muchas compañeras y compañeros para tratar de sostener a los chicos y chicas en sus casas; desde la lúdico, cuidando sus cabezas, los miedos, sus tiempos y comentó que “hay publicaciones de videítos de títeres, de cuentos contados, de muchas cosas que este momento no dejan de conmoverme”