En medio de la cuarentena y con la consigna de “quedarse en casa” desde el movimiento de mujeres advierten que sin las medidas necesarias puede haber un agravamiento de la situación de las mujeres que sufren violencia de género en el hogar.

Laura Delmonte, militante del PTP y de la Campaña por la Emergencia Nacional en violencia hacia las mujeres”, explica que “nosotras las mujeres estamos en una particular situación donde nos la vemos difícil, porque la principal herramienta que nos permite resolver o abordar por lo menos el tema de la pandemia del coronavirus es el aislamiento, que es aquello de lo cual nosotras durante años venimos trabajando para evitarlo en las mujeres en relación a la violencia hacia la mujer”

E insiste que “lo peor que le puede pasar a una mujer es quedar aislada en relación a situaciones de maltrato dentro de la familia y la pareja. Por lo cual nosotros tenemos que ser agentes de salud en relación a estar atentas a estás situaciones que pueden suscitarse en los barrios sobre situaciones de violencia”

Con respecto a qué hacer en torno a esta problemática que se profundiza a raíz de la cuarentena Laura asegura que es necesario que el movimiento de mujeres pueda ser parte de los comités de crisis que se van organizando desde los municipios.

“Tenemos que ser parte de la discusión en relación a lo que van a pasar las mujeres, porque nosotras preveemos que la problemática se va a agudizar en esta situación, tenemos que trabajarlo con quiénes están en contacto con las poblaciones con dificultades, por ejemplo los agentes de salud, enfermeras, médicos, y tratar de que esta variable en relación a las mujeres se incorpore como una posibilidad más. Tenemos que informar lo más claramente posible la cuestión de los lugares donde son atendidas con información real, porque a veces no coinciden con la información que se difunde, principalmente información real sobre los teléfonos o las oficinas se están abiertas, etc.” advierte Delmonte.

Con respecto a donde dirigirse aconseja que “en lo posible realizar las denuncias en los espacios judiciales” y propone.

Por otro lado en Rosario solo existen dos refugios para mujeres que sumados no superan las 50 plazas y es por eso que uno de los principales pedidos al municipio es la realización de un relevamiento de la disponibilidad hotelera para ponerlos al servicio de las víctimas.

“Así como se están buscando espacios como hoteles en las ciudades para poder habilitarlos ante un eventual desborde del problema de la pandemia y transformar las habitaciones en lugares de internación, también tienen que procurar espacios específicos para este estado de crisis donde esas mujeres que son sufrientes de violencia en los hogares y los chicos puedan rápidamente salir y tener un refugio donde ubicarse”, asegura la militante del movimiento de mujeres.

Finalmente alerta por el alarmante crecimiento de los femicidios desde el comienzo de año, “durante todo este breve periodo que ya hemos transitado de crisis en todo el país hemos sufrido situaciones de asesinatos de mujeres por parte de sus parejas, ex parejas, etc”